Sajô ha comenzado a estudiar en la universidad y sus nuevos compañeros se muestran muy interesados en averiguar si eso que tenía en el cuello el día del examen era lo que parecía… ¿quizá con segundas intenciones? Sin embargo, Kusakabe está cumpliendo la promesa de ir a visitarlo a menudo, de tal forma que los días que ambos comparten en Kioto van consolidando su relación. Mientras, en Tokio, Koma se encuentra con un viejo conocido al que había perdido la pista, y Arisaka, por su parte, recibe la noticia de que su hija está a punto de casarse y desea reencontrarse con él. Hibiki le anima a estrechar lazos con ella.
Sajô ha comenzado a estudiar en la universidad y sus nuevos compañeros se muestran muy interesados en averiguar si eso que tenía en el cuello el día del examen era lo que parecía… ¿quizá con segundas intenciones? Sin embargo, Kusakabe está cumpliendo la promesa de ir a visitarlo a menudo, de tal forma que los días que ambos comparten en Kioto van consolidando su relación. Mientras, en Tokio, Koma se encuentra con un viejo conocido al que había perdido la pista, y Arisaka, por su parte, recibe la noticia de que su hija está a punto de casarse y desea reencontrarse con él. Hibiki le anima a estrechar lazos con ella.
Un alumno nuevo llamado Yuuma ha llegado al instituto. Compañeros y profesores se percatan de que Yuuma tiene la extraña costumbre de disculparse vehementemente por todo, incluso cuando no hay motivo para pedir perdón. Keiko, una chica de su clase, traba amistad con él y descubre que Yuuma tuvo que hacerse cargo de su hermana pequeña, Chizumi, tras la muerte de sus severos padres. La niña, como la propia Keiko tiene la desgracia de comprobar, no es precisamente un angelito. Y, sin embargo, ¿será cierto lo que dice sobre las prácticas satánicas de Yuuma? ¿Le ha contado el chico toda la verdad sobre la muerte de sus padres? Y, sobre todo, esa manía de disculparse, ¿se debe a la estricta educación recibida por Yuuma o esconde... algo más?
Han pasado tres años desde la graduación del instituto. Sajô ahora estudia en la Universidad de Kioto. En Tokio, Kusakabe alterna trabajillos a tiempo parcial mientras continúa con la música. ¿Qué les deparará el futuro a los dos, ahora que han emprendido caminos distintos?
Nueva entrega de En la misma clase, la historia del amor entre dos chicos que ha conquistado lectores en el mundo entero.
Han pasado tres años desde la graduación del instituto. Sajô ahora estudia en la Universidad de Kioto. En Tokio, Kusakabe alterna trabajillos a tiempo parcial mientras continúa con la música. ¿Qué les deparará el futuro a los dos, ahora que han emprendido caminos distintos?
Nueva entrega de En la misma clase, la historia del amor entre dos chicos que ha conquistado lectores en el mundo entero.
Sajô y Kusakabe son más o menos igual de altos, tienen la misma edad y van a la misma clase. Por lo demás, no puede decirse que tengan mucho en común. Kusakabe, de carácter inquieto y despreocupado, toca en un grupo de rock con sus amigos y deja pasar los días sin pensar mucho en el futuro. Sajô, en cambio, es un alumno modélico que no termina de encajar en ese instituto de macarras, al que nadie sabe muy bien cómo fue a parar. Un día, Kusakabe se da cuenta de que su compañero no canta en los ensayos del coro para intentar disimular su falta de oído musical, así que se ofrece a darle unas lecciones. Entre refrescos compartidos bajo el sol de verano, nace entre ellos un amor de adolescencia que crecerá con el devenir de las estaciones. De la mano, compartiendo sinsabores y alegrías, ambos se encaminarán hacia el final de sus días de instituto y el comienzo de la vida adulta.
Sajô y Kusakabe son más o menos igual de altos, tienen la misma edad y van a la misma clase. Por lo demás, no puede decirse que tengan mucho en común. Kusakabe, de carácter inquieto y despreocupado, toca en un grupo de rock con sus amigos y deja pasar los días sin pensar mucho en el futuro. Sajô, en cambio, es un alumno modélico que no termina de encajar en ese instituto de macarras, al que nadie sabe muy bien cómo fue a parar. Un día, Kusakabe se da cuenta de que su compañero no canta en los ensayos del coro para intentar disimular su falta de oído musical, así que se ofrece a darle unas lecciones. Entre refrescos compartidos bajo el sol de verano, nace entre ellos un amor de adolescencia que crecerá con el devenir de las estaciones. De la mano, compartiendo sinsabores y alegrías, ambos se encaminarán hacia el final de sus días de instituto y el comienzo de la vida adulta.
Sajô y Kusakabe son más o menos igual de altos, tienen la misma edad y van a la misma clase. Por lo demás, no puede decirse que tengan mucho en común. Kusakabe, de carácter inquieto y despreocupado, toca en un grupo de rock con sus amigos y deja pasar los días sin pensar mucho en el futuro. Sajô, en cambio, es un alumno modélico que no termina de encajar en ese instituto de macarras, al que nadie sabe muy bien cómo fue a parar. Un día, Kusakabe se da cuenta de que su compañero no canta en los ensayos del coro para intentar disimular su falta de oído musical, así que se ofrece a darle unas lecciones. Entre refrescos compartidos bajo el sol de verano, nace entre ellos un amor de adolescencia que crecerá con el devenir de las estaciones. De la mano, compartiendo sinsabores y alegrías, ambos se encaminarán hacia el final de sus días de instituto y el comienzo de la vida adulta.
Este BL coral es la obra más querida de Haruko Kumota. Una dulce y picante comedia romántica que te robará el corazón.
Kei llega a Tokio desde Hokkaidô para mudarse con su novio, Misaburô, un joven abiertamente gay del que lleva separado seis años. Lo que Kei no sabe es que su chico ahora se gana el pan escribiendo relatos pornográficos. Además, no vive solo, sino que comparte pensión con una divorciada que trabaja como chica de alterne, su hijo pequeño, una vedette transgénero, un eterno universitario dado a la vida bohemia y un puñado de gatos. En esa jaula de grillos, Kei intentará hacerse a su vida en la gran ciudad, a los amigos que Misaburô ha conocido en el ambiente y, sobre todo, a la idea de que la relación entre ambos va en serio. Y es que, en el fondo, se muere por ir más allá de los tímidos besos que habían compartido en el instituto…
Kei y Mii son amigos desde la infancia y novios desde el instituto. Después de unos años separados, Kei se muda a Tokio desde Hokkaidô para reunirse con su chico. Sin embargo, la pensión que Mii regenta en la capital está muy lejos de ser el nidito de amor que Kei se había imaginado. Más bien es una casa de locos habitada por inquilinos a cada cual más excéntrico. Pero el ser humano a todo se acostumbra, y Kei se adapta a la vida en Tokio con una facilidad pasmosa. Ahora es capaz de plantar cara a Hino, el tiránico editor de su novio. Además, se ha ganado a los amigos gays de Mii, ¡e incluso insistió en defender que ambos son pareja ante su conservadora abuela! Alentado por estos avances, Mii se da cuenta de que también le ha llegado la hora de dejar atrás la cobardía y decirle a su Kei que… ¡quiere acostarse con él!
Este BL coral es la obra más querida de Haruko Kumota. Una dulce y picante comedia romántica que te robará el corazón.
Kei llega a Tokio desde Hokkaidô para mudarse con su novio, Misaburô, un joven abiertamente gay del que lleva separado seis años. Lo que Kei no sabe es que su chico ahora se gana el pan escribiendo relatos pornográficos. Además, no vive solo, sino que comparte pensión con una divorciada que trabaja como chica de alterne, su hijo pequeño, una vedette transgénero, un eterno universitario dado a la vida bohemia y un puñado de gatos. En esa jaula de grillos, Kei intentará hacerse a su vida en la gran ciudad, a los amigos que Misaburô ha conocido en el ambiente y, sobre todo, a la idea de que la relación entre ambos va en serio. Y es que, en el fondo, se muere por ir más allá de los tímidos besos que habían compartido en el instituto…
Este BL coral es la obra más querida de Haruko Kumota. Una dulce y picante comedia romántica que te robará el corazón.
Kei llega a Tokio desde Hokkaidô para mudarse con su novio, Misaburô, un joven abiertamente gay del que lleva separado seis años. Lo que Kei no sabe es que su chico ahora se gana el pan escribiendo relatos pornográficos. Además, no vive solo, sino que comparte pensión con una divorciada que trabaja como chica de alterne, su hijo pequeño, una vedette transgénero, un eterno universitario dado a la vida bohemia y un puñado de gatos. En esa jaula de grillos, Kei intentará hacerse a su vida en la gran ciudad, a los amigos que Misaburô ha conocido en el ambiente y, sobre todo, a la idea de que la relación entre ambos va en serio. Y es que, en el fondo, se muere por ir más allá de los tímidos besos que habían compartido en el instituto…
Kei y Mii son amigos desde la infancia y pareja desde el instituto. Después de unos años separados, Kei se muda a Tokio desde Hokkaidô para reunirse con su novio. Las estaciones se suceden y Kei deja de ser un ingenuo chico de provincias para irse acostumbrando a la vida en la capital junto a Mii. Está a punto de cumplirse el primer aniversario de su reencuentro.
Los dos han ido aprendiendo a entenderse y se quieren más que nunca. Ha llegado la hora de que Kei ayude a Mii a enfrentarse a los fantasmas del pasado. Intentará convencerlo de que visite la tumba de sus padres y, por Nochevieja, lo llevará de vuelta a Otaru para pasar las Fiestas con su familia. Allí tendrá lugar un encuentro inesperado.
Aparte, Mii sigue con ganas de montárselo con Kei las 24 horas del día, pero eso… ¡lo van sobrellevando como pueden!
El largo camino a casa es la precuela de Mi lindo minino. Cuenta el inicio de la historia de amor entre sus protagonistas y se puede leer de forma independiente.
Mii y Kei son dos vecinos y amigos que cursan el último año de instituto en Otaru, una pequeña ciudad de la isla de Hokkaidô al norte de Japón. Desde que se mudó allí, Mii ha sabido que estaba enamorado de Kei. Sin embargo, nunca se ha atrevido a confesarle sus sentimientos por miedo a perderlo.
Sinopsis: Hazuki se enamora a primera vista de Rokka, la dueña de una floristería. Poco después, comienza a trabajar allí con la única intención de acercarse a ella. Cuando por fin consigue que lo invite a su casa, queda consternado al descubrir que no vive sola. Shimao, su difunto marido, permanece a su lado en forma de fantasma. Sin embargo, sólo Hazuki puede verlo y comunicarse con él. El espíritu no tarda en lanzarle una declaración de intenciones: no está dispuesto a dejarle ocupar su lugar junto a Rokka. Al mismo tiempo, le confiesa que sufre por no poder hacer feliz a su esposa, por lo que propone a Hazuki un trato algo particular.